Cuando la retirada no es signo de cobardía

En el arte de la guerra, la diplomacia e incluso en el amor, existe el triunfo y la derrota. Saber perder es parte de la enseñanza diaria entre guerreros, diplomáticos y aventureros.

Luego de analizar las situaciones y de observar bien a las personas uno puede darse cuenta de los pros y contras que podrán venir con el paso del tiempo. Por ejemplo, ver que personas se dicen de carácter y creen que manteniendose enojado, escupiendo malas palabras a diestra y siniestra, siendo impulsivas, etc. puede uno tomar dos decisiones: Mantenerse cerca, enseñarles, educarlos y rectificar...o simplemente dejarlos hablando solos. La lucha por amor no existe... existe la lucha por ser uno mismo, por vivir bien y tranquilo.

Antes de enfrentar las situaciones uno debería hacerse la pregunta: ¿Vale la pena fregarme la vida por esta persona, por este trabajo, por este dinero, por este viaje o por esta situación? La decisión es lo que diferencia a los "ombres" de los Hombres. Renunciar y retirarse suele ser más doloroso pero más inteligente... y requiere más agallas.

No todas las personas dejan a la novia que molesta todos los días, el trabajo que odian, el novio que cela, la universidad que cobra... prefieren "luchar" y ser mártir. No todos tienen el suficiente valor para enfrentar la soledad, el desempleo, cerrar puertas y dejar amigos... todo para ser mejor y liberarse de ese desgaste a largo plazo.

La decisión, amigos míos es base para que digan: No se pudo, adiós. Borrón y cuenta nueva. Similar a la escena del capitan Willard de Apocalypsis Now... va algo así:

- Jefe Phillips: Debemos llevarla a un hospital cercano. Está herida.
- Cap. Willard No podemos llevarla a ningún lado. No debemos detenernos.
- Ph: Yo soy el capitán del barco y decido que hay que llevarla.
- Wi: Yo el capitán de la misión y no nos detendremos
- Ph: ¡Es una orden!

El capitán calla... saca su pistola. Le asesta un tiro certero a la mujer herida. Silencio absoluto.

-Wi: Te dije que no nos detuvieramos.

Por último algo una frase muy cierta:
La basura tiene un sólo lugar: el basurero.